Como una premonición el titulo de la película me recordaba
el vertiginoso rugido de una canción de Metallica: Whiplash, el sexto track de
un álbum emblemático que dejo un buen
sabor de boca y en hermoso recuerdo trashmetalero en los corazones de quienes seguimos
el rock and roll desde hace tiempo; el tufillo de una banda gloriosa que se
perdió, desde mi punto de vista después de su tercer álbum, y que hoy dia solo
convence a quienes poco entienden de música o les falta camino que recorrer y
oído que educar.
El redoblante no cesa, taca taca taca taca taca, Miles (Como
Davis) Teller, toca como un demonio
buscando velocidad. Escena premonitoria de la locura musical, del desenfreno de
las emociones, de la búsqueda de la excelencia, de los sueños de ser “un grande,
estar entre los grandes.”
El vértigo de mi adolescencia, fue revivido. No fue una
guitarra eléctrica, fueron las notas azules. El film nominado a los premios
Oscar de este año, tiene un homónimo en mi pasado,lleva el nombre de una legendaria canción y en sus imágenes
y banda sonora se experimenta lo mejor de la vida. ¡Notas azules, tan arriba
como puedan estarlo! La fotografía del film y su magnífico reparto hacen llorar,
lo que viene es el miedo y la felicidad, no hay más, lo que queda de ti cuando el film termina es la grandiosa sensación haberlo vivido, de haberlo visto, “canta el corazón
huele a yervaguena”.
WHIPLASH
Dir. Damien Chazelle
Andrew Neyman es un baterista joven y prometedor que se
matricula en el conservatorio de música feroz donde sus sueños de grandeza son
asesorados por Terence Fletcher, un conductor de la música perfeccionista que
no se detendrá ante nada para darse cuenta del talento potencial de un
estudiante.
Producción
David Lancaster
Michel Litvak
Jason Blum
Guion
Damien Chazelle
Música
Justin Hurwitz
Fotografía
Sharone Meir
Montaje
Tom Cross
Reparto
Miles Teller
J. K. Simmons
Melissa Benoist
Austin Stowell
Jayson Blair
Kavita Patil