¿De qué pueden hablar un hombre y una mujer que no se ven desde hace 5 años y tien tienen en común un pasado tanto doloroso como lleno de amor? La respuesta a esta pregunta es la película española Ayer no termina nunca, dirigida por Isabel Coixet.
Con un guion simple y unos diálogos profundos y humanos Isabel Coixet nos lleva a ver la vida y los sentimientos de una pareja que se separó desde hace cinco años en las peores circunstancias, y vuelven a reencontrarse llenos de heridas que aparentemente parecían curadas.
Rodada en el año 2013, pero situada en el 2007 en una España que no puede levantarse de la crisis y en donde Messi gana millones de euros mientras los millones de parados (desempleados) por la crisis española aguantan hambre y frio, se da el encuentro de dos ex esposos que se reúnen para arreglar un asunto muy personal en la ciudad de Barcelona.
Cada uno de ellos desde su separación tiene una vida diferente, a él se le ve muy aplomado, bien vestido con apariencia de que la vida aparentemente lo ha tratado bien en el exterior, él es quien huye del país por que no aguanta vivir en la pobreza y la tristeza de su relación; ella en cambio es más idealista decidiendo quedarse y vivir las consecuencias de la crisis y de todo lo que ha sucedido desde su separación.
Ayer no termina nunca nos lleva a explorar desde un montaje totalmente teatral pero rodado en 35 mm, el dolor de la pérdida desde dos perspectivas distintas de vivir y enfrentar la vida.
Ahora bien, todo no puede ser bueno, quienes quieran ver la película deberán tener una buena dosis de paciencia, la película se torna en momentos lenta, aunque nunca aburrida. Muy importante y que debe destacarse es que todo el reparto de Ayer no termina nunca son tan solo dos actores: Javier cámara y Candela Peña, ellos están desnudos en su actuación, mantienen la tensión del film por medio de actuaciones brillantes y la personificación de sentimientos creando una película de contenido, llena de actuación pura y sobre todo sin efectos ni maquillajes.
